El animador suizo Georges Schwizgebel es conocido por elaboración intrincado, cambiante obras que ofrecen imágenes dignas de un lienzo en cada cuadro. Con su alegre animación Juego (2006), que se traduce del francés como “juego” o “juego”, combina una parte del Concierto para piano del compositor ruso Sergei Prokofiev. número 2, Opus 16 (1913) con una serie de secuencias que evocan el postimpresionismo en sus pinceladas y ricos matices, y MC Escher en su exploración geométrica que cambia de perspectiva. Moviéndose entre escenas reconocibles de salas de conciertos, museos y parques, y momentos de abstracción, la pieza evoca la abrumadora complejidad y el ritmo vertiginoso de la vida moderna.