Por David Milliken
WASHINGTON (Reuters) – La ministra de Finanzas británica, Rachel Reeves, dijo que presentará su próximo presupuesto como una oportunidad para restablecer la economía del país e impulsar la inversión cuando se reúna con sus socios internacionales en Washington el jueves.
Reeves se encuentra en un viaje de dos días a las reuniones anuales del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial, menos de una semana antes de que presente el primer presupuesto del Partido Laborista después de 14 años fuera del poder.
Fuentes gubernamentales dijeron la semana pasada que su objetivo sería recaudar alrededor de 40 mil millones de libras (52 mil millones de dólares) a través de una combinación de aumentos de impuestos y ahorros limitados en el gasto público para impulsar los servicios públicos y llenar un agujero presupuestario dejado por la administración anterior.
El periódico británico Guardian informó el miércoles que Reeves también aprovecharía las reuniones del FMI para impulsar un cambio en las reglas fiscales que restringen el endeudamiento gubernamental. Cuando se le preguntó sobre el informe, un portavoz del Tesoro dijo que el ministerio no hizo comentarios sobre especulaciones presupuestarias.
“Estaré en Washington para decirle al mundo que nuestro próximo presupuesto será un reinicio para nuestra economía a medida que invertimos en las bases del crecimiento futuro”, dijo Reeves en un comunicado emitido con motivo del inicio de su viaje.
“Es a partir de esta base sólida que podremos representar mejor los intereses británicos y mostrar liderazgo en cuestiones importantes como los conflictos en Oriente Medio y Ucrania”.
A principios de esta semana, Gran Bretaña dijo que prestaría a Ucrania 3.000 millones de dólares para comprar armas como parte de un préstamo más amplio del Grupo de los Siete países ricos, respaldado por activos congelados del banco central ruso.
El Ministerio de Finanzas de Gran Bretaña dijo que Reeves apoyaría las propuestas en Washington para ampliar el financiamiento del desarrollo para los países más pobres para cumplir con los objetivos de desarrollo sostenible de las Naciones Unidas y alentar a los países del G20, en general más ricos, a ser más transparentes sobre su propia deuda.
El martes, el FMI mejoró su pronóstico de crecimiento para 2024 para Gran Bretaña más que para cualquier otro país del G7, aunque sus pronósticos, del 1,1% para 2024 y del 1,5% para 2025, siguen siendo modestos en comparación con los estándares históricos.
El prestamista global también dijo que Gran Bretaña, como la mayoría de los demás países del G7, necesitaba frenar un aumento de la deuda pública.
Reeves ha estado considerando cambios en las reglas presupuestarias internas de Gran Bretaña para facilitar la financiación de la inversión pública, potencialmente mediante el uso de una definición más flexible de deuda pública que permita compensar una gama más amplia de activos públicos con el endeudamiento.
The Guardian dijo que Reeves planeaba apuntar a una medida conocida como pasivos financieros netos del sector público -que permite que los activos financieros ilíquidos se computan contra la deuda- en lugar del objetivo existente de deuda neta del sector público, excluyendo al Banco de Inglaterra.
El grupo de expertos del Instituto de Estudios Fiscales de Gran Bretaña estimó anteriormente que tal cambio permitiría potencialmente 50 mil millones de libras adicionales de endeudamiento.
($1 = 0,7746 libras)
