Por Marcela Ayres y Rodrigo Campos
WASHINGTON (Reuters) – El Fondo Monetario Internacional instó el viernes a los gobiernos de América Latina y el Caribe (ALC) a orientar políticas económicas destinadas a impulsar el crecimiento potencial, diciendo que su agenda de reformas es actualmente “débil”, mientras que se espera que la actividad se modere en economías clave. .
En su Perspectiva Económica Regional, el FMI proyectó que el crecimiento de la región se acelerará hasta el 2,5% el próximo año, frente al 2,1% de este año. Pero la expansión del llamado grupo LA7, que incluye a Brasil, Chile, Colombia, México, Paraguay, Perú y Uruguay, se desacelerará al 2,0%, frente al 2,4% en 2024.
Las estimaciones de crecimiento de la región se publicaron a principios de esta semana como parte de las Perspectivas de la economía mundial del FMI.
El FMI destacó que se proyecta que el crecimiento a mediano plazo en la región de ALC (excluidas Argentina y Venezuela) será de alrededor del 2,5% anual durante los próximos cinco años y probablemente se mantendrá cerca de su bajo promedio histórico. Esto refleja desafíos duraderos y no resueltos, como la baja inversión, el lento crecimiento de la productividad y los cambios demográficos.
“Es preocupante que la actual agenda de reformas sea escasa y podría conducir a un círculo vicioso de bajo crecimiento, descontento social y políticas populistas”, dijo el FMI.
Según el FMI, un factor clave detrás de las “tibias” perspectivas de crecimiento es la fuerte desaceleración esperada en el crecimiento de la fuerza laboral debido a la caída de las tasas de natalidad y al envejecimiento de la población.
El FMI también advirtió que la deuda de la región seguirá aumentando sin reformas de consolidación fiscal, que dijo son necesarias para crear espacio para la normalización de la política monetaria, reducir las expectativas de inflación y reducir el riesgo país.
“Serían necesarios esfuerzos mayores y más duraderos para encaminar firmemente la deuda hacia una senda descendente, dado el diferencial desfavorable entre tasas de interés y crecimiento que enfrenta la región”, afirmó el FMI.
Entre sus recomendaciones, el FMI enfatizó la necesidad de movilizar ingresos, particularmente aumentando la recaudación del impuesto a la renta personal, que sigue siendo baja en toda la región.
“El enfoque de las autoridades debería pasar de políticas cíclicas a políticas estructurales destinadas a elevar el crecimiento potencial”, añadió, señalando medidas que podrían fomentar el comercio internacional, desarrollar sectores de alta tecnología, mejorar la eficiencia de la inversión pública y promover un mercado laboral más flexible.
“Con su rica dotación de minerales verdes, la región se encuentra en una posición única para aprovechar los beneficios de la transformación verde global, aunque hacerlo requiere fortalecer los marcos de inversión para atraer capital y al mismo tiempo aumentar los ingresos de los recursos naturales para atender las necesidades de inversión social y pública”, dijo el FMI.
