Un nuevo material desarrollado en UC Berkeley podría ayudar a reducir el coste de capturar dióxido de carbono del aire.
A principios de este año, científicos de la Universidad de California, Berkeley, llenaron un dispositivo con un polvo de color amarillo brillante, lo conectaron a un tubo y clavaron el tubo a través de la pared de un laboratorio. Durante los siguientes 20 días, utilizaron el material para extraer CO2 del aire exterior. Luego extrajeron el CO2 del polvo, repitiendo el proceso 100 veces.