La versión final de los estándares es más débil que una propuesta inicial de la agencia que, según los fabricantes de automóviles, sería prácticamente imposible de cumplir.
Los estándares de economía de combustible publicados el viernes están diseñados para complementar las reglas de emisiones establecidas por la Agencia de Protección Ambiental en marzoy tener en cuenta los esfuerzos liderados por los reguladores estatales de California para estimular la adopción de vehículos eléctricos. Los automóviles y camiones privados son una fuente importante de emisiones de carbono, y una parte clave de la agenda ambiental de la administración Biden implica impulsar un aumento dramático en la cantidad de vehículos propulsados por baterías en las carreteras.
Los fabricantes de automóviles pueden cumplir con los nuevos estándares mejorando la eficiencia del combustible de sus vehículos que queman gas y aumentando la cantidad de modelos que producen que funcionan con electricidad.
“Estos nuevos estándares no sólo ahorrarán a los estadounidenses dinero en el surtidor cada vez que reposten, sino que también disminuirán la contaminación nociva y harán que Estados Unidos dependa menos del petróleo extranjero”, dijo el secretario de Transporte, Pete Buttigieg, en un comunicado.
La respuesta de los defensores del medio ambiente a las nuevas reglas fue mixta: algunos argumentaron que no van lo suficientemente lejos y otros las elogiaron como un importante paso adelante.
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“La norma final de hoy es otro paso importante para reducir la contaminación por carbono y frenar el cambio climático”, dijo Harold Wimmer, presidente y director ejecutivo de la Asociación Estadounidense del Pulmón. “Los nuevos requisitos de eficiencia de combustible para automóviles, SUV y camionetas nuevos son beneficiosos para los consumidores y para la salud. Los vehículos más eficientes salvarán vidas y dinero”.
Además de cuestionar el rigor de las propuestas, la industria automotriz había expresado su preocupación de que al aplicar diferentes conjuntos de reglas superpuestas, la administración corría el riesgo de crear obstáculos legales para los fabricantes de automóviles. Pero los funcionarios dijeron que diferentes agencias habían trabajado para colaborar en los estándares. John Bozzella, director ejecutivo de la Alianza para la Innovación Automotriz, dijo que la NHTSA parecía haber emitido una “regla que funciona con otras reglas federales recientes sobre tubos de escape”.
La administración Biden ha tomado varias medidas para que más conductores utilicen vehículos eléctricos, respaldando créditos fiscales para compras e invirtiendo en una red de cargadores públicos. Pero el crecimiento de las ventas se ha desacelerado en los últimos meses, a medida que el tamaño de la flota eléctrica supera el número de lugares para enchufar.
La iniciativa también ha enfrentado la oposición de los republicanos. Donald Trumpel presunto candidato presidencial del partido, ha dicho que abandonaría las reglas climáticas emitidas por Biden.
