“Mis estudios en el extranjero me permitieron hacer cosas que no podría experimentar en ningún otro lugar”, dijo Stewart. “Tuve la oportunidad de mirar a una tortuga de Galápagos a los ojos, nadar junto a cachorros de lobos marinos, bailar con los lugareños en el Inti Raymi (lo que hizo muy feliz a mi corazón de antropólogo) y hacer muchos amigos en el camino. ¡Fue una experiencia que nunca olvidaré!”
El Dr. Alexis Janosik, profesor y coordinador del programa de posgrado, dirigió la primera cohorte de 14 estudiantes en junio y Chasidy Hobbs, instructora de ciencias de la tierra y el medio ambiente y directora de conservación, dirigió una segunda cohorte de 14 estudiantes en julio.
“Como ecólogo molecular y debido a los animales únicos que han evolucionado allí durante millones de años en aislamiento, las Islas Galápagos siempre han sido un lugar que despertó mi interés”, dijo Janosik. “Encontramos organismos sorprendentes, conectamos con personas únicas, experimentamos un paisaje hostil y hermoso, y aprendimos muchísimo sobre la historia geológica y evolutiva de las islas”.
Los estudiantes de biología marina, biología, antropología, actuación y licenciatura en Bellas Artes de la UWF visitaron las islas Santa Cruz e Isabella mientras aprendieron sobre la ecología y la evolución de las Galápagos. Recolectaron microplásticos en las playas de las Galápagos, aprendieron sobre los “Derechos de la Naturaleza” de Ecuador, así como sobre la geología y la biodiversidad de las islas y pasaron tiempo estudiando en la Estación Científica Charles Darwin. Los estudiantes con honores recibieron apoyo de becas del Programa de Honores Kugelman.
“Mi experiencia en las Galápagos fue de otro mundo”, dijo Zoe Salandy, estudiante de biología marina. “Una de mis partes favoritas de todo el viaje es que nos sumergimos en la cultura. El viaje no se trató solo de los animales o las plantas. Fue una experiencia verdaderamente completa de las Galápagos. Estábamos inmersos en la cultura, la tierra y la gente”.
Sarafina Mowe, estudiante de biología marina, dijo que era un sueño hecho realidad estar completamente inmersa en un área tan histórica y diversa.
“Estar rodeado de tortugas gigantes, leones marinos y pingüinos me impresionó por la belleza que nuestro mundo tiene para compartir con nosotros”, dijo Mowe. “Y nunca antes me imaginé que un grupo de estudiantes se convertiría más tarde en algunas de las personas más asombrosas. No solo aprendí más sobre el darwinismo y la importancia de la sostenibilidad, sino que en solo la semana que estuvimos allí, aprendí más sobre mí mismo y por qué quiero dedicarme a la investigación y seguir trabajando en este maravilloso campo”.
