El Banco Mundial elevó su perspectiva de crecimiento global el martes gracias a la resiliencia del gasto de los consumidores en Estados Unidos, pero advirtió que el crecimiento sigue siendo débil según estándares históricos.
En pronósticos actualizados, el prestamista de desarrollo con sede en Washington dijo que ahora espera que la economía mundial crezca un 2,6 por ciento este año en términos reales, 0,2 puntos porcentuales más que su última actualización en enero.
Su pronóstico de crecimiento global para 2025 se mantiene sin cambios en 2,7 por ciento, por debajo de la tasa promedio de 3,1 por ciento observada en la década anterior a la pandemia de Covid-19.
“El crecimiento está en niveles más bajos que antes de 2020”, dijo en un comunicado el economista jefe del grupo del Banco Mundial, Indermit Gill, añadiendo que las perspectivas para las economías más pobres del mundo “son aún más preocupantes”.
“Se enfrentan a niveles castigadores de servicio de la deuda, restricciones a las posibilidades comerciales y eventos climáticos costosos”, dijo Gill, añadiendo que necesitarían encontrar formas de atraer nuevas inversiones privadas y reducir la deuda pública.
El banco ahora espera que las economías de mercados emergentes y en desarrollo crezcan un 4,0 por ciento este año, ligeramente por encima del pronóstico de enero pero también por debajo de los niveles prepandémicos.
El Banco Mundial mejoró su pronóstico de crecimiento para 2024 para las economías avanzadas del mundo al 1,5 por ciento (0,3 puntos porcentuales más) debido casi en su totalidad a un fuerte aumento en sus perspectivas proyectadas para Estados Unidos.
Ahora espera que la economía estadounidense crezca un 2,5 por ciento este año, 0,9 puntos porcentuales más que en enero, impulsada en gran medida por un consumo y gasto gubernamental “robustos”, así como por una reducción de las importaciones.
La mejora de las perspectivas de Estados Unidos es responsable del 80 por ciento del aumento de las perspectivas de crecimiento global para 2024, dijo a los periodistas el economista jefe adjunto del Banco Mundial, Ayhan Kose, antes de la publicación del informe.
El Banco Mundial también mejoró las perspectivas de crecimiento para China, la segunda economía más grande del mundo, pero dijo que todavía espera una desaceleración este año en medio de una caída en la actividad inmobiliaria.
Ahora espera un crecimiento del 4,8 por ciento este año, 0,3 puntos porcentuales más que en enero.