Un hombre de Nueva York ha sido condenado a 20 meses de prisión por conspirar para defraudar a los Estados Unidos ocultando ingresos al Servicio de Impuestos Internos (IRS). Aniello Strocchia, propietario y operador de un taller de reparación de automóviles en Maspeth, fue declarado culpable de evadir casi un millón de dólares en impuestos durante un período de cinco años.
Según los documentos judiciales y las declaraciones realizadas durante el proceso, Strocchia participó en un esquema desde 2013 hasta 2017 en el que cobró más de $1.3 millones en cheques emitidos a nombre de su taller de reparación de automóviles en empresas de cambio de cheques comerciales. En lugar de depositar estos fondos en la cuenta bancaria del taller, Strocchia ocultó estos ingresos a los preparadores de su declaración de impuestos. Como resultado, las declaraciones de impuestos presentadas tanto para su cuenta comercial como para sus cuentas personales declararon significativamente menos ingresos brutos del taller, ingresos comerciales ordinarios y sus ingresos personales totales.
Además de no declarar todos sus ingresos, Strocchia no pagó la totalidad de los impuestos que declaró adeudados en sus declaraciones personales. En lugar de cumplir con sus obligaciones fiscales, utilizó los ingresos ocultos para financiar un estilo de vida lujoso, que incluyó la compra de una colección de coches de lujo, la adquisición de una segunda vivienda y el gasto de aproximadamente 500.000 dólares en amplias reformas de la vivienda.
La pérdida fiscal total para el IRS como resultado de las acciones de Strocchia ascendió a $989,976.
Además de la sentencia de 20 meses de prisión, el juez federal de distrito Héctor González para el Distrito Este de Nueva York ordenó a Strocchia cumplir dos años de libertad supervisada después de su condena en prisión. También se le ordenó a Strocchia pagar 989.976 dólares en concepto de restitución a los Estados Unidos.
El anuncio de la sentencia de Strocchia estuvo a cargo del fiscal general adjunto interino Stuart M. Goldberg, de la División de Impuestos del Departamento de Justicia, y del fiscal federal Breon Peace para el Distrito Este de Nueva York. El caso fue investigado por la División de Investigación Criminal del IRS y el abogado litigante Matthew Cofer, de la División de Impuestos, fue el encargado de procesar el caso.
