El PIB de la India aumentó un 6,7%, menos que el 6,9% previsto por una encuesta de Reuters y el crecimiento del 7,8% del trimestre anterior, debido a una disminución del gasto gubernamental durante las elecciones nacionales.
“En general, los datos del PIB del segundo trimestre son más débiles de lo esperado, aunque aún no está claro el papel de factores transitorios como las elecciones, frente a factores más persistentes como la desaceleración del crecimiento de las ganancias”, dijeron los analistas de Nomura, en una nota fechada el 30 de agosto.
Se espera que la desaceleración de la economía de la India sea temporal, ya que los economistas pronostican que la disminución de la inflación y un repunte del gasto gubernamental apuntalarán el crecimiento en los próximos meses.
Sin embargo, Nomura añadió que “a pesar de que el gasto gubernamental se reactiva, es probable que persistan un menor crecimiento de las ganancias corporativas y una moderación en el crecimiento del crédito a medida que el crecimiento se desacelera”.
Por otra parte, Goldman Sachs y JPMorgan mantuvieron su pronóstico de PIB para el año fiscal 25 para la tercera economía más grande de Asia en 6,5%.
