El divorcio se ha considerado durante mucho tiempo un tema tabú en el trabajo. Pero las cosas podrían estar cambiando (lentamente) a medida que los beneficios laborales por divorcio se vuelven más comunes.
Cuando Rebecca Feinglos decidió divorciarse, fue la última de una serie de tragedias personales. “Toda mi vida ha estado basada en el dolor y la pérdida, pero ni siquiera lo sabía”, dice Feinglos. Su madre había fallecido cuando ella era una niña y, después de esa experiencia, canalizó su dolor para perseguir el éxito profesional.
