LAFAYETTE, KATC— Con tambores rítmicos que resuenan en el aire y trajes vibrantes arremolinándose, el grupo indígena femenino Danza Aztec Lafayette encarna siglos de tradición, honrando su herencia y expresando gratitud a Nuestra Señora de Guadalupe, una santa querida en México.
“Es algo inexplicable, porque lo tienes en el corazón y bailas para tu virgen y bailas con todo el amor”, dice Alverica Vega, una bailarina indígena azteca. “Es algo inexplicable, porque lo llevas en el corazón y bailas para tu virgen (Santa) con todo el amor, representando tu cultura y tu pueblo”.
Danza Aztec Lafayette honra las tradiciones ancestrales al contar historias a través del movimiento y la música, brindando una poderosa conexión con sus raíces. Vega explica que estas devociones se intensifican en los días previos al 12 de diciembre, cuando realizan ceremonias religiosas en la iglesia, vistiendo coloridos trajes tradicionales como homenaje a Guadalupe por sus bendiciones para la comunidad.
“Cuando estoy bailando, siento el dolor en mis rodillas, en mis pies, en mis brazos, en mi corazón, y me dejo llevar y se lo doy”, comparte Syre Muñoz, reflexionando sobre la profunda conexión emocional que siente. siente durante las actuaciones.
Los bailarines usan tocados intrincados, o cupiresque simbolizan cubrir el tercer ojo. “Cada miembro elige su color favorito para representar su energía al bailar, mostrando los colores vibrantes de nuestra cultura al mundo”, explica Vega.
La esperanza es que este legado trascienda las fronteras e inspire a la próxima generación a abrazar y celebrar su identidad cultural. Mientras suenan los tambores, Danza Aztec Lafayette continúa manteniendo vivas sus tradiciones, asegurando que el espíritu de sus antepasados prospere en las generaciones futuras.
