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“El dinero genera dinero. Estamos comprando un terreno que tiene una cascada. Podríamos construir la casa de nuestros sueños y alquilarla en Airbnb, y potencialmente podríamos pagar la casa en 10 años. El dinero para comprar el terreno provino de la 'diversificación' de nuestros activos y nuestra cartera financiera. Asumiríamos algún riesgo para construir esta casa, obteniendo otra hipoteca. Pero teóricamente, si todo funciona, no habríamos gastado nada, pero obtendríamos una casa de ensueño gratis y más. ¿Para qué? Por casi nada. Si la cagáramos y perdiéramos nuestra inversión, quemáramos toda la propiedad o algo así, igualmente estaría bien. No sería el fin de nuestras vidas. Sería desafortunado, pero se podría sobrevivir…”
“Cuando yo era pequeña, mi madre preparaba ramen para una comida familiar especial. Usaba tres paquetes de ramen para nuestra familia de cuatro. Le añadía arroz al caldo del ramen cuando todavía teníamos hambre. Una vez que usábamos algo, desaparecía. Así que éramos frugales. Un desastre financiero significaba morir de hambre, perder la casa, etc. ¿Gasté mal mis $10 de la semana? Ya no podía permitirme comer más y tuve que morirme de hambre durante una semana. Nunca podría haber imaginado que una vez que tienes suficiente dinero, solo ganas más dinero”.
