12 de junio de 2024
El compromiso de los empleados en la fuerza laboral de EE. UU. ha alcanzado un alarmante mínimo en 11 años, con solo el 30% de los empleados involucrados activamente en el trabajo, según Gallup. Esta caída significativa en el compromiso y el aumento de la desconexión resalta un desafío apremiante para los líderes de diversas industrias sobre cómo fomentar una cultura en la que los empleados se sientan motivados y valorados.
¿Qué estrategias pueden implementar los líderes para transformar la desconexión en un compromiso proactivo dentro de sus organizaciones?
“Liderazgo holístico: el futuro del trabajo y la educación en la atención sanitaria,” alojado por Geoffrey Rochecaracterísticas Tom Willis, cofundador y socio de Socios de rendimiento de Phoenix y autor de “El gran compromiso: cómo los directores ejecutivos crean culturas excepcionales.“Juntos, profundizan en las complejidades de fomentar una cultura de compromiso en el lugar de trabajo.
Puntos clave de discusión:
- El compromiso como antídoto a la resignación: Willis enfatiza que centrarse en el compromiso, en lugar de la resignación, puede contrarrestar la tendencia a la “renuncia silenciosa” y la desconexión.
- Creando una cultura de pertenencia y seguridad psicológica: El liderazgo eficaz requiere equilibrar la seguridad psicológica con alentar a los empleados a ejercer valentía psicológica.
- El papel del liderazgo en el alivio del estrés: Los líderes deben adoptar un enfoque estratégico para reducir el estrés en el lugar de trabajo, garantizando un entorno más solidario y productivo.
Tom Willis es un líder experimentado con experiencia diversa en educación, consultoría y gestión ejecutiva. Se desempeñó como director ejecutivo de Cornerstone y trabajó como consultor en PricewaterhouseCoopers e ingeniero en Intel Corporation. Con títulos de la Universidad de Michigan y un MBA de la Universidad de Notre Dame, Willis aporta un gran conocimiento y experiencia a su puesto en Phoenix Performance Partners. También es autor de “El gran compromiso: cómo los directores ejecutivos crean culturas excepcionales”.