Este interés por la cultura local, aunque esporádico, ha estado presente durante el siglo pasado, con ligeras diferencias contextuales entre generaciones. Sin embargo, los profesionales creativos egipcios parecen siempre regresar a estos temas, tal vez como parte de una búsqueda continua de una identidad poscolonial aún no realizada.
Para comprender plenamente esta estética, creo que debemos empezar por observar cómo se ha representado la cultura egipcia a través de la mirada occidental, porque no se pueden ignorar los ecos de estas representaciones en las expresiones culturales egipcias contemporáneas.
En la etnografía temprana, el arte orientalista y la literatura de viajes, Egipto aparecía constantemente como el objeto por excelencia de la mirada colonial, visto a través de una lente que acentuaba su alteridad, reforzando una narrativa colonial de inferioridad.