Sólo el 4,4% de los adultos padece realmente el trastorno, pero muchos más se diagnostican erróneamente.
En los últimos años, hemos escuchado mucho sobre la “neurodivergencia” en las redes sociales, incluidos trastornos genéticos como el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH). La creciente conciencia de las diferencias en las capacidades de aprendizaje significa que más personas pueden comprender, manejar y buscar tratamiento para una variedad de afecciones. Pero, a medida que un número cada vez mayor de personas ve y se relaciona con el contenido en línea, parece haber llevado a muchos autodiagnósticos.
