De cualquier manera, habrá nuevos esfuerzos para frenar las importaciones de chips chinos y autos inteligentes a los EE. UU.
El Guerra tecnológica entre Estados Unidos y China es casi seguro que calentar no importa si es republicano Donald Trump o vicepresidente Kamala Harris gane las elecciones presidenciales estadounidenses del 5 de noviembre, y es probable que el demócrata presente nuevas reglas específicas y Trump un enfoque más directo.