Durante semanas, hemos visto que los números económicos, como la inflación y el desempleo, tienden en la dirección correcta. Índice de precios al consumidor muestra que la inflación alcanzó el nivel más bajo en tres años.
Pero los precios siguen siendo altos. Los precios de los alimentos, por ejemplo, aumentaron sólo un 0,1% en julio, pero hoy en día los precios de los alimentos siguen siendo un 21% más altos que hace tres años.
Otro indicador económico positivo que se conoció esta semana es el número récord de aplicaciones para pequeñas empresas recibidos durante la administración del presidente Biden: 19 millones, la cifra más alta para cualquier mandato presidencial.
Esas solicitudes son sólo un primer paso, y un número mucho menor de nuevas pequeñas empresas (1,3 millones) abrieron sus puertas. Pero esa cifra también es un récord y, según la Casa Blanca, es clave para ayudar a la clase media.
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“La creación de nuevas empresas es realmente el alma de nuestra economía. Eso es lo que genera valor en las comunidades. Eso es lo que genera riqueza para las familias, y riqueza intergeneracional para las familias”, dijo Jon Donenberg, subdirector del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca.
Pero a pesar de los informes económicos positivos, el presidente Biden y otros en el gobierno federal reconocen que las familias todavía están luchando para llegar a fin de mes.
“Al final, esa es la estadística económica que realmente importa: cuánto dinero tienes en tu billetera, cuánto dinero hay en tu cuenta bancaria, y eso es lo que entra en términos de tus salarios, y lo que sale en términos de tus costos. Y creo que esta administración realmente tiene un sólido historial en esos temas”, dijo Donenberg.
La administración Biden dice que los esfuerzos para reducir los costos de los medicamentos recetados, eliminar las tarifas basura y detener los aumentos injustos de los alquileres tienen como objetivo ayudar a aliviar las cargas financieras que enfrentan los estadounidenses.
La economía ha sido un tema central en la campaña presidencial. El expresidente Donald Trump culpa a la administración Biden por los altos precios que enfrentamos hoy, y sus promesas de campaña económica incluyen poner fin a los impuestos sobre las propinas.
La vicepresidenta Kamala Harris tiene previsto presentar su propio plan económico esta semana. Ya ha dicho que apoya la eliminación de los impuestos sobre las propinas, pero con un límite de ingresos. Se espera que su plan se centre en el desarrollo de la clase media y la reducción de los precios.
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