La Gran Recesión de 2008-2009 dejó cicatrices sin cicatrizar y la crisis económica provocada por el Covid-19 asestó un nuevo golpe a Estados Unidos. Las preocupaciones sobre la inestabilidad de los mercados financieros están resurgiendo. BCA Research, una organización canadiense de investigación de inversiones, predice volatilidad en el mercado de valores de Estados Unidos en el futuro.
De acuerdo a Negocios de FoxEn una nota a los clientes la semana pasada, el estratega global jefe de BCA Research, Peter Berezin, advirtió que, contrariamente a la creencia popular, la economía caerá en una recesión este año o a principios de 2025. Si eso sucede, el S&P 500 podría caer a 3.750, lo que marca una caída del 30% desde los niveles actuales.
La predicción de Berezin se basa en la creencia de que el mercado laboral se desacelerará notablemente en los próximos meses, lo que afectará considerablemente al gasto de consumo, un importante motor del crecimiento económico. La relación entre inflación y desempleo se mide mediante algo llamado la “curva de Phillips”.
“La razón por la que Estados Unidos evitó una recesión en 2022 y 2023 fue que la economía estaba operando a lo largo del lado empinado de la curva de Phillips”, escribió. “Cuando la curva de oferta laboral es casi vertical, una demanda laboral más débil conducirá principalmente a un menor crecimiento salarial y una caída de las vacantes de empleo. En otras palabras, una desinflación inmaculada”.
Berezin también prevé grandes desafíos económicos, entre ellos una notable desaceleración del crecimiento en China y Europa, lo que podría contribuir al debilitamiento de la economía mundial y aumentar la presión sobre los mercados bursátiles internacionales.
El Dow Jones Industrial Average superó los 40.000 puntos por primera vez a mediados de mayo, lo que supuso un nuevo récord. Sin embargo, ahora ha caído desde esos picos.
Esta predicción, que podría estar entre las más pesimistas de Wall Street, llega después de un año turbulento para el mercado.