Por David Lawder
WASHINGTON (Reuters) – La directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, dijo el jueves que esperaba que los candidatos presidenciales estadounidenses Donald Trump y Kamala Harris adoptaran un enfoque “muy pragmático” hacia el FMI y el Banco Mundial.
Georgieva dijo a Reuters en una entrevista que dependía del pueblo estadounidense elegir a su líder el 5 de noviembre y que ha tenido una experiencia positiva trabajando con administraciones estadounidenses actuales y pasadas, incluida la del expresidente Trump.
Mientras los líderes financieros mundiales se reúnen en Washington la próxima semana para las reuniones anuales del FMI y el Banco Mundial, una gran pregunta en sus mentes será el futuro del liderazgo estadounidense en las instituciones, dada la reñida contienda entre el candidato republicano Trump y el candidato demócrata Harris.
Trump ha prometido aumentos arancelarios masivos sobre los productos chinos y otras importaciones, como parte de un regreso a su retirada del multilateralismo de “Estados Unidos primero”.
La agenda republicana conservadora del “Proyecto 2025”, de la que Trump se ha distanciado, exige la retirada de Estados Unidos del FMI y del Banco Mundial para perseguir únicamente ayuda financiera y de desarrollo bilateral en línea con los intereses estadounidenses.
Georgieva presentó una visión más optimista sobre los posibles resultados de las elecciones estadounidenses.
“Mi experiencia con Estados Unidos -cualquier administración- ha sido siempre muy positiva”, dijo Georgieva. “Estados Unidos es muy pragmático. Aporta una actitud positiva. Es exigente y eso me gusta”.
Trabajó con la administración Trump como directora ejecutiva del Banco Mundial en 2018 para conseguir un aumento de capital de 13.000 millones de dólares y, más tarde, como directora del FMI, para canalizar financiación de ayuda rápida por la COVID-19 a economías en dificultades en todo el mundo.
En ese momento, el Tesoro de Estados Unidos se quejaba de los préstamos excesivos del Banco Mundial a China, y Georgieva dijo que la administración Trump había exigido reformas para aumentar los costos de endeudamiento para los países más grandes de ingresos medios para desalentar dichos préstamos a cambio de respaldar el aumento de capital.
“Desde esa perspectiva, creo que podemos ver la misma actitud muy práctica y pragmática en el futuro” por parte de las administraciones estadounidenses, añadió.
El martes, el presidente del Banco Mundial, Ajay Banga, citó el aumento de capital de 2018 como prueba de que Trump reconoce el valor del liderazgo estadounidense en las dos instituciones. Añadió que el Banco Mundial puede multiplicar los dólares para el desarrollo y ayudar a convertir a los países pobres en mercados prósperos para las empresas estadounidenses.
Estados Unidos es el mayor accionista tanto del FMI como del Banco Mundial y tiene un poder de veto efectivo sobre las principales decisiones estructurales.
Georgieva dijo que en lugar de denunciar las nuevas restricciones comerciales propuestas como “incorrectas”, el FMI estaba trabajando para comprender el ímpetu del aumento de las restricciones comerciales, particularmente en economías avanzadas como Estados Unidos y Europa.
“Tratemos de comprender los factores que influyen en todos y cada uno de los países, y luego analicemos cuál es la posible respuesta y cuáles son los costos y beneficios, y luego trabajemos con nuestros miembros para promover una toma de decisiones más racional”, dijo.
