La misma cantidad de ejercicio beneficia más a las mujeres que a los hombres: ¿Verdadero o falso? |
Los hombres y las mujeres son distintos fisiológica y psicológicamente, y las distintas acciones y experiencias los afectan física y emocionalmente de distintas maneras. Lo mismo se ha demostrado en lo que respecta al ejercicio y sus beneficios.
Según un estudio reciente publicado en el Journal of the American College of Cardiology, las mujeres necesitan solo la mitad de ejercicio que los hombres para obtener los mismos beneficios de longevidad. En este estudio, los hombres que hacían 300 minutos de ejercicio aeróbico por semana tenían un 18% menos de riesgo de morir, en comparación con los hombres inactivos. Pero en el caso de las mujeres, solo 140 minutos de ejercicio semanal les proporcionaban el mismo beneficio. Se observaron resultados similares con ejercicios de fortalecimiento muscular como el levantamiento de pesas. Los investigadores atribuyeron estos hallazgos a que las mujeres tienen menos masa muscular y, por lo tanto, se benefician más de una menor cantidad de ejercicio.
Según el Dr. Haresh G Mehta, Director de Cardiología Intervencionista y el Dr. Kayan Siodia, Consultor de Cardiología Intervencionista del SL Raheja Hospital, Mahim, “Las diferencias fisiológicas basadas en el género entre hombres y mujeres han sido investigadas anteriormente y se han analizado las diferencias en la capacidad pulmonar, el sistema cardiovascular, la masa corporal magra y la interacción hormonal. Es bien sabido que las mujeres premenopáusicas tienen un menor riesgo cardiovascular debido al beneficio protector del estrógeno”.

Estos estudios deben interpretarse con cautela y en el contexto adecuado. Se trata principalmente de estudios observacionales que se basan en datos autonotificados y no pueden utilizarse para demostrar relaciones de causa y efecto. También tienen múltiples factores de confusión que no se tienen en cuenta en su totalidad.

Debemos entender que no puede haber un único enfoque para el ejercicio y la salud en general. El riesgo cardiovascular y la longevidad están influenciados en general por una interacción compleja entre diversos factores, entre ellos la genética, las comorbilidades, la dieta, los patrones de sueño, el estrés y las opciones de estilo de vida. El nivel óptimo de actividad física puede cambiar en función de la edad, el estado de salud y los perfiles de riesgo individuales.
Si bien es fantástico que se estén realizando nuevas investigaciones en el campo del ejercicio y la longevidad, quizá no sea del todo apropiado simplificar demasiado y reducir estos conceptos a meras ecuaciones basadas en el género.

No necesitas ir al gimnasio: prueba este eficaz entrenamiento en casa para ponerte en forma rápidamente



Fuente