Hidrógeno geológico: ¿la próxima fiebre del oro?

Alrededor del 96% del hidrógeno se produce a partir de combustibles fósiles, y alrededor del 1% se deriva de fuentes renovables. La demanda mundial de hidrógeno está en aumento y aumentará a 95 millones de toneladas para 2022. A medida que más de 150 naciones se han comprometido a reducir las políticas ecológicas, la producción de hidrógeno se ha enfrentado a desafíos e incertidumbre, por lo que los multimillonarios de izquierdas están apostando a lo grande por la búsqueda de hidrógeno enterrado.

Bill Gates y Jeff Bezos se encuentran entre los fundadores de una nueva empresa llamada Kolomauna empresa de hidrógeno geológico que “aprovecha su tecnología, datos patentados y ventajas de capital humano para identificar y comercializar estos recursos a escala global”. La empresa con sede en Denver ya ha recaudado más de 305 millones de dólares y cree que puede cambiar la forma en que el mundo utiliza el hidrógeno.

“El hidrógeno geológico debería tener un impacto de carbono muy bajo, pero también una huella de carbono minúscula y un impacto hídrico muy bajo”, afirmó Pete Johnson, director ejecutivo de Koloma. Johnson mencionó que Rusia y Ucrania eran grandes exportadores de amoníaco derivado del hidrógeno, que se necesita para la mayoría de los productos fertilizantes. “Los recursos de hidrógeno geológico en los EE. UU. nos permitirán aumentar nuestra producción nacional de amoníaco y convertirnos en un exportador neto, al mismo tiempo que reducimos drásticamente la huella de carbono de los productos”, agregó.

Hidrógeno geológico

Como se indica en el sitio web de la empresa:

“Our production methods source hydrogen in a clean, continuous, and cost-effective manner, eliminating the barriers that have historically hindered widespread adoption. We are actively engaged in exploration and are appraising assets that will play a significant role in US decarbonization efforts. As the rapidly emerging geologic hydrogen industry takes shape, Koloma’s data-driven approach will power the discovery of geologic hydrogen resources around the world.”

El hidrógeno geológico se promociona como “hidrógeno dorado” o “hidrógeno blanco”, ya que sus orígenes naturales lo hacen aceptable para las políticas ecológicas. Están surgiendo otras empresas emergentes, como Breakthrough Energy, que cuenta con el respaldo de Jack Ma de Alibaba y Richard Branson de Virgin. Varias empresas están ahora extrayendo hidrógeno en Estados Unidos, Canadá, Australia, Francia, España, Colombia y Corea del Sur.

Los expertos no se ponen de acuerdo sobre si habrá suficiente hidrógeno geológico para marcar una diferencia notable en el uso de energía en el mundo. La Coalición Científica del Hidrógeno, por ejemplo, cree que los descubrimientos producirán menos energía que una sola turbina eólica. Eso no impide que grandes cantidades de dinero apoyen proyectos para buscar hidrógeno enterrado en lo que podría convertirse en la próxima fiebre del oro.

No hay ningún plan en marcha para cumplir con la Agenda 2030 ni con el objetivo de avanzar hacia la neutralidad climática para 2050. ¿Será esta la próxima fiebre del oro? Depende de los resultados de los descubrimientos y de lo difícil que resulte para las empresas acceder al hidrógeno, pero no se parecerá en nada a la verdadera fiebre del oro, en la que el hombre medio podía hacer una fortuna. No veremos migraciones masivas a zonas llenas de hidrógeno geológico potencial, a diferencia de la fiebre del oro, en la que gente de todo el mundo se trasladó al oeste de Estados Unidos. Esta será una industria para la élite multimillonaria, como lo serán todas las medidas de cambio climático que no aportan ningún beneficio al hombre medio.

Fuente