El fabricante de chips Intel Corp. está recortando el 15% de su enorme fuerza laboral (alrededor de 15.000 puestos de trabajo) mientras intenta dar un giro a su negocio para competir con rivales más exitosos como Nvidia y AMD.
En un memorando al personal, el director ejecutivo de Intel, Pat Gelsinger, dijo el jueves que la compañía planea ahorrar 10 mil millones de dólares en 2025. “En pocas palabras, debemos alinear nuestra estructura de costos con nuestro nuevo modelo operativo y cambiar fundamentalmente la forma en que operamos”, escribió en el memorándum publicado en el sitio web de Intel. “Nuestros ingresos no han crecido como se esperaba y aún no hemos aprovechado plenamente las tendencias poderosas, como la IA. Nuestros costos son demasiado altos y nuestros márgenes son demasiado bajos”.
Los recortes de empleo se producen tras un trimestre y un pronóstico decepcionantes para el icónico fabricante de chips fundado en 1968 al comienzo de la revolución de la PC.
La semana que viene, escribió Gelsinger, Intel anunciará una “oferta de jubilación mejorada” para los empleados que cumplan los requisitos y ofrecerá un programa de solicitud para salidas voluntarias. Intel tenía 124.800 empleados a finales de 2023, según un documento reglamentario.
“Estas decisiones me han puesto a prueba hasta lo más profundo de mi ser y es lo más difícil que he hecho en mi carrera”, afirmó. Se espera que la mayor parte de los despidos se completen este año.
La compañía con sede en Santa Clara, California, también está suspendiendo su dividendo sobre acciones como parte de un plan más amplio para reducir costos.
Intel reportó una pérdida para su segundo trimestre junto con una pequeña disminución de ingresos, y pronosticó ingresos para el tercer trimestre por debajo de las expectativas de Wall Street.
La empresa registró una pérdida de 1.600 millones de dólares, o 38 centavos por acción, en el período abril-junio. Eso es menor que la ganancia de 1.500 millones de dólares, o 35 centavos por acción, del año anterior. Las ganancias ajustadas excluyendo partidas especiales fueron de 2 centavos por acción.
Los ingresos cayeron un 1% a 12.800 millones de dólares desde 12.900 millones de dólares.
Los analistas, en promedio, esperaban ganancias de 10 centavos por acción sobre ingresos de 12.900 millones de dólares, según una encuesta de FactSet.
“El anuncio de Intel de un importante plan de reducción de costes que incluye despidos puede reforzar sus resultados financieros a corto plazo, pero esta medida por sí sola no es suficiente para redefinir su posición en el cambiante mercado de chips”, afirmó el analista de eMarketer, Jacob Bourne. “La empresa se enfrenta a una coyuntura crítica, ya que aprovecha la inversión estadounidense en la fabricación nacional y la creciente demanda mundial de chips de IA para establecerse en la fabricación de chips”.
Con la ayuda de los esfuerzos de lobby de Gelsinger, Intel ha sido un importante beneficiario de la Ley CHIPS y Ciencia de 2022, que la administración Biden ayudó a aprobar en el Congreso en un momento de preocupaciones después de la pandemia de que la pérdida de acceso a los chips fabricados en Asia podría hundir la economía estadounidense en una recesión.
En marzo, El presidente Joe Biden celebró un acuerdo Para proveer Intel Con hasta 8.500 millones de dólares en financiación directa y 11.000 millones de dólares en préstamos para plantas de chips informáticos en todo el país, elogió la inversión en el estado de Arizona, un campo de batalla político, y la calificó como una forma de “devolver el futuro a Estados Unidos”. En ese momento, Gelsinger calificó la Ley CHIPS como “la legislación de política industrial más crítica desde la Segunda Guerra Mundial”.
En septiembre de 2022, Biden elogió a Intel como creadora de empleos con sus planes de abrir una nueva planta cerca de Columbus, Ohio. El presidente los elogió por sus planes de “construir una fuerza laboral del futuro” para el proyecto de 20 mil millones de dólares, que según él generaría 7.000 puestos de trabajo en la construcción y 3.000 empleos a tiempo completo que pagarían un promedio de 135.000 dólares al año.
Las acciones cayeron más del 20% a 23,82 dólares en las operaciones posteriores al cierre, lo que indica que Intel podría perder aproximadamente 24.000 millones de dólares de su valor de mercado cuando el mercado de valores abra el viernes.
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El periodista de Associated Press Josh Boak contribuyó a este despacho desde Washington.
