Por Padraic Halpin y Conor Humphries
DUBLÍN (Reuters) – El gobierno irlandés entregó el martes a los votantes 10.500 millones de euros en recortes de impuestos y aumentos de gasto en un presupuesto preelectoral que también describió cómo utilizará una ganancia fiscal inesperada de 14.000 millones de euros (15.600 millones de dólares) de Apple (NASDAQ 🙂 para mejorar la infraestructura chirriante.
El primer ministro Simon Harris debe convocar elecciones para marzo, pero la mayoría de los analistas ven noviembre como la fecha más probable, cuando los votantes comenzarán a beneficiarse del último derroche presupuestario resultante del conjunto de finanzas públicas más saneadas de Europa.
Su gobierno distribuyó 10.500 millones de euros a pensionados, padres, inquilinos, trabajadores y beneficiarios de asistencia social en el mayor presupuesto no pandémico desde los años del Tigre Celta de Irlanda, equivalente a unos 2.000 euros por cada hombre, mujer y niño.
Por tercer año consecutivo, el gobierno violó sus propias reglas presupuestarias, que supuestamente debían limitar el crecimiento del gasto al 5%, lo que generó acusaciones de la oposición de que estaba tratando de comprar las elecciones.
“El presupuesto de hoy es único por la oportunidad que presenta para planificar, transformar y lograr resultados para el futuro”, dijo al Parlamento el ministro de Finanzas, Jack Chambers.
“Está claro que la oferta es la principal limitación al crecimiento en la actualidad. Estamos invirtiendo a gran escala para abordar estos cuellos de botella y poner en marcha soluciones a largo plazo”.
En momentos en que algunos países de la UE se están apretando el cinturón, una explosión en los ingresos por impuestos corporativos, pagados principalmente por unas pocas grandes multinacionales estadounidenses, le ha dado a Irlanda uno de los pocos superávits presupuestarios de Europa.
Los impuestos atrasados de Apple aumentarán ese superávit al 7,5% del ingreso nacional este año.
La ganancia inesperada resultó de una decisión de un tribunal de la UE según la cual Apple se había beneficiado indebidamente de lagunas jurídicas injustas en el régimen fiscal de Irlanda, diseñadas precisamente para atraer a las grandes empresas tecnológicas a establecer sedes europeas en Irlanda.
Esos ingresos y 3.000 millones de euros de la venta de acciones bancarias se gastarán en proyectos de agua, energía, vivienda y transporte a más largo plazo, aunque el uso exacto de la parte de Apple no se concretará hasta principios del próximo año.
Irlanda ha luchado por mantenerse al día con las demandas de una economía y una población en rápido crecimiento y abordar los problemas de vivienda, transporte y atención médica a pesar de un gran gasto de capital.
El presupuesto incluía un paquete de ayudas “únicas” para cubrir el coste de la vida por tercer año consecutivo, esta vez por un total de 2.200 millones de euros, a pesar de que la inflación ha caído a casi cero desde el 5% de hace un año y el 9% en el año. antes de eso.
Harris negó que se tratara de un regreso a los presupuestos regalados de mediados de la década de 2000 que precedieron al colapso de la economía del Tigre Celta, señalando los 6 mil millones de euros que el gobierno estaba reservando en su nueva riqueza soberana y fondos de infraestructura a largo plazo.
(1 dólar = 0,8961 euros)