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La insatisfacción con los costos de la vivienda ha alcanzado un nivel récord en los países ricos, superando otras preocupaciones como la atención médica y la educación.
La mitad de los encuestados en los países de la OCDE están insatisfechos con la disponibilidad de viviendas asequibles, según cifras de Gallup Analytics, un marcado aumento desde que los bancos centrales subieron las tasas de interés para lidiar con el peor episodio de inflación en una generación.
Si bien las tasas más altas han ayudado a reducir los precios de las propiedades en varios países europeos, la vivienda sigue siendo más cara que antes de la pandemia, incluso antes de tener en cuenta los mayores costos de los préstamos.
En Estados Unidos, los precios de las viviendas se han disparado a pesar de las subidas de los tipos de interés. Casi el 60% de los encuestados en la mayor economía del mundo dijo estar insatisfecho con la oferta de viviendas asequibles.
Mientras tanto, los alquileres han aumentado en un momento en que el aumento de los precios de otros productos esenciales, como los alimentos y el combustible, han reducido los ingresos disponibles.
Los investigadores atribuyen en parte la crisis de asequibilidad a la falta de construcción de nuevas viviendas.
“Básicamente, no hemos construido lo suficiente”, dijo Willem Adema, economista senior de la división de política social de la OCDE, y agregó que los desarrolladores a menudo apuntaban a los hogares más ricos, lo que exacerbaba la tensión sobre aquellos con ingresos más bajos.
Andrew Wishart, analista de Capital Economics, dijo: “Las tendencias demográficas pueden cambiar mucho más rápido que la oferta de viviendas”.
El descontento con la vivienda jugará un papel importante en las elecciones de este año, especialmente en Estados Unidos, donde los votantes acudirán a las urnas en noviembre.
El precio medio de la vivienda es ahora casi un 38 por ciento más alto que cuando el presidente estadounidense Joe Biden asumió el cargo en enero de 2021, según El índice Case-Shiller.
Investigación Un estudio del Centro Conjunto de Estudios de Vivienda de la Universidad de Harvard mostró que el pago mensual de una vivienda de precio medio con un préstamo con depósito bajo, como el que prefieren los compradores primerizos, era ahora de 3.096 dólares, en comparación con alrededor de 2.000 dólares en enero de 2021.
Mientras tanto, muchos propietarios de viviendas actuales han firmado hipotecas a 30 años con tasas ultra bajas y, en general, están pagando menos por el servicio de la deuda como porcentaje de sus ingresos que en cualquier otro momento desde 1980, según Harvard.
Los datos de Gallup, basados en las respuestas de más de 37.000 personas en los 37 países que conforman el club de estados ricos de la OCDE, muestran que el descontento por la asequibilidad de la vivienda es mayor entre los menores de 30 años y aquellos de entre 30 y 49 años, muchos de los cuales pueden estar tratando de acceder a la escalera inmobiliaria.
Alrededor del 44 por ciento de los mayores de 50 años estaban insatisfechos con la vivienda en los países de la OCDE, pero la proporción aumentó al 55 por ciento para los menores de 30 años y al 56 por ciento para los de 30 a 49 años.
En Inglaterra, los precios de las viviendas son ahora ocho veces superiores al salario medio anual, según las estadísticas oficiales. Se trata de una proporción más del doble de la observada cuando el último gobierno laborista asumió el poder en 1997. El número de familias que viven en alojamientos temporales en Inglaterra también ha alcanzado un nivel récord.
Alrededor del 30% de la población de los países ricos estaba insatisfecha con el sistema de salud, la educación y el transporte público. El descontento con el nivel de vida aumentó en 2023, pero solo ligeramente, pasando del 24% al 25%.
La encuesta mundial Gallup se realiza anualmente. La encuesta de 2023 se basa en las respuestas de 145.702 personas en 142 países y se pondera según la población. A los encuestados se les pregunta sobre una variedad de cuestiones socioeconómicas y políticas.
Algunos países para los que ya se dispone de datos de 2024 han mostrado un nuevo aumento de la insatisfacción con la vivienda este año. En Alemania, la proporción de personas descontentas con la disponibilidad de viviendas asequibles aumentó hasta un nuevo máximo del 46%, frente al 42% de 2023 y más del doble de los niveles registrados hasta 2012. En España, la proporción de personas insatisfechas con la vivienda aumentó al 62% en 2024, el nivel más alto desde la crisis financiera.
Información adicional de Janina Conboye en Londres