Las autoridades de transporte holandesas dijeron el jueves que han confiscado miles de “fatbikes” eléctricas ilegales importadas de China, mientras el país amante de las bicicletas se enfrenta a una nueva moda que incluso ha provocado un acalorado debate en el parlamento.
Un envío de unas 16.500 fatbikes ilegales —llamadas así por sus neumáticos anchos y sus robustos cuadros que se asemejan a una motocicleta baja— fue detenido en Rotterdam, mientras que otras 1.000 fueron incautadas en un centro de distribución holandés.
Las bicicletas eléctricas están limitadas a 25 kilómetros por hora (15 mph) en Europa y la Inspección de Transporte y Medio Ambiente Humano de los Países Bajos dijo que las fatbikes incautadas “podrían ser manipuladas para ir más rápido” que el límite legal.
También tenían baterías potentes y otras especificaciones técnicas de los ciclomotores, añadió.
El número de fatbikes se ha disparado en los Países Bajos desde que en enero de 2023 se hizo obligatorio que los conductores de scooters motorizados llevaran casco.
La medida hizo que muchos se cambiaran a las fatbikes, para las cuales no se requiere casco.
Pero la moda de las fatbikes (bicicletas con ruedas anchas) —son especialmente populares entre los adolescentes— ha provocado una gran cantidad de quejas y ha motivado un llamado a favor de una nueva legislación destinada a restringir su uso.
Además del zumbido que producen los grandes neumáticos en la carretera, las autoridades también están preocupadas por la facilidad con la que se eluden los programas informáticos que limitan la velocidad al límite legal.
La popularidad de las fatbikes también ha generado la importación de bicicletas que no tienen limitadores de velocidad, baterías más potentes de lo permitido y aceleradores que las hacen más parecidas a las motocicletas.
La cuestión incluso provocó un acalorado debate entre el nuevo gobierno holandés y los legisladores el miércoles.
Los legisladores piden que se introduzca una restricción de edad mínima de 14 años para utilizar fatbikes y que el uso de casco sea obligatorio.
También quieren una nueva definición legal dirigida específicamente a las fatbikes en contraposición a otras bicicletas eléctricas.
Pero el ministro de Infraestructura, Barry Madlener, se opuso a la distinción y afirmó que “los fabricantes de fatbikes simplemente se adaptarán a las nuevas reglas”.
Se espera que se vote sobre este asunto en las próximas dos semanas.
La creciente popularidad de las fatbikes también ha provocado un rápido aumento de las visitas a urgencias, según la organización de seguridad holandesa Veiligheid.nl.
El año pasado se registraron 59 incidentes graves, y en los primeros cuatro meses de este año ya se registraron 33 incidentes, según la organización.
La agencia de investigación medioambiental Cyclomedia afirmó en una encuesta reciente que casi la mitad de los habitantes de Ámsterdam se sienten en riesgo en el tráfico y que el “nuevo transporte urbano”, como las fatbikes, suele ser acusado de situaciones inseguras.
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