Por David Milliken
LONDRES (Reuters) – Las empresas británicas están preocupadas de que las mayores protecciones para los empleados planeadas por el nuevo gobierno laborista electo harán que sea más riesgoso contratar nuevo personal, dijo el domingo la Confederación de la Industria Británica (CBI).
El Partido Laborista se comprometió en su campaña electoral a exigir a los empleadores que ofrezcan a todo el personal licencia por maternidad o paternidad, horas mínimas garantizadas, paga por enfermedad y protección contra despidos injustificados. El gobierno está preparando ahora propuestas legislativas específicas.
Según la legislación actual, el personal empleado durante menos de dos años puede ser despedido sin que el empleador tenga que demostrar mala conducta o bajo rendimiento.
La CBI dijo que una encuesta anual a empleadores, realizada con la agencia de reclutamiento Pertemps, mostró una preocupación generalizada entre las empresas más pequeñas de que sería difícil despedir a los nuevos trabajadores que no tuvieran un buen desempeño.
“Si bien el gobierno ha dicho que las empresas pueden usar períodos de prueba, la posibilidad de que las decisiones al final del período de prueba sean impugnadas en un tribunal laboral ha hecho que el 75% de los encuestados diga que serían más cautelosos al contratar personal nuevo”, dijo el director de trabajo y habilidades de CBI, Matthew Percival.
La CBI dijo que el 62% de los empleadores esperaban que Gran Bretaña se convirtiera en un peor lugar para invertir y hacer negocios durante los próximos cinco años, impulsado por un aumento de 6 puntos porcentuales desde el año pasado en aquellos que esperaban que las cosas empeoraran “mucho”.
La regulación del empleo es un problema para el 39% de los empleadores en la actualidad, pero el 58% espera que se convierta en un problema en los próximos cinco años, según la encuesta de 152 empresas, dos tercios de ellas pequeñas o medianas.
La tasa de desempleo de Gran Bretaña es baja según estándares históricos, un 4,1%, pero el Partido Laborista ha criticado al gobierno conservador anterior por permitir que la participación en la fuerza laboral cayera desde niveles récord previos a la pandemia.
El Partido Laborista quiere elevar la tasa de participación en la fuerza laboral a un récord del 80% de la población en edad de trabajar desde el 78,1%. Antes de la pandemia, la tasa alcanzó un máximo del 79,5%.
