Varias cadenas minoristas que han estado tratando de pasar a la atención primaria han estado recortándose o retirándose por completo. A pesar de sus dificultades, hay un lugar para las cadenas minoristas en el sector de la atención sanitaria. Pero para conseguirlo, tendrán que revisar sus estrategias. Hacerlo implica hacer de la atención primaria un negocio central, expandirse a comunidades rurales y suburbanas, avanzar hacia una atención más compleja con márgenes más altos y asociarse con otros proveedores.
