Por Kanishka Singh
WASHINGTON (Reuters) – El candidato presidencial republicano Donald Trump se ha comprometido a reducir los impuestos a los ciudadanos estadounidenses que viven en el extranjero, en su último intento de atraer votantes antes de las elecciones del 5 de noviembre, en las que está enfrascado en una reñida carrera con la vicepresidenta demócrata Kamala Harris.
POR QUÉ ES IMPORTANTE
Tanto Trump como Harris han hecho en las últimas semanas promesas económicas para atraer a los votantes. Harris ha dicho que intentará aprobar un recorte de impuestos para la clase media, mientras que Trump ha abogado por reducir los impuestos sobre el pago de horas extras. Ambos candidatos han apoyado la eliminación de los impuestos a las propinas.
CITA CLAVE
“Apoyo poner fin a la doble imposición de los estadounidenses en el extranjero”, dijo Trump en un comunicado de su campaña. El Wall Street Journal fue el primero en informar sobre los planes de Trump. La declaración no ofreció detalles específicos sobre cómo implementaría esta política.
CONTEXTO
Los estadounidenses que viven o viajan fuera de los Estados Unidos deben presentar declaraciones de impuestos sobre la renta, declaraciones de impuestos sobre el patrimonio y declaraciones de impuestos sobre donaciones y “pagar impuestos estimados de la misma manera que aquellos que residen en los Estados Unidos”, según el Servicio de Impuestos Internos de los Estados Unidos.
Estados Unidos tiene tratados fiscales con varios países extranjeros que ya permiten tasas reducidas y exenciones. Los estadounidenses en el extranjero no tienen que pagar impuestos estadounidenses sobre sus primeros 126.500 dólares de ingresos del trabajo y son elegibles para algunos créditos fiscales extranjeros, según el IRS.
Reclamar el crédito fiscal extranjero puede permitir a las personas reducir efectivamente su obligación tributaria en Estados Unidos y evitar la doble imposición sobre los mismos ingresos obtenidos internacionalmente.
EN NÚMEROS
Alrededor de 4,4 millones de ciudadanos estadounidenses vivían en el extranjero en 2022, según datos del Programa Federal de Asistencia para el Voto. Alrededor de 2,8 millones de ellos tenían derecho a votar en sus antiguos estados.
