Los científicos confirman una importante conexión entre la semaglutida y la salud mental

La semaglutida, quizás más conocida por sus marcas comerciales Wegovy y Ozempic, ha dominado los titulares durante meses. La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) aprobó el medicamento para la diabetes tipo 2 en diciembre de 2017, pero en los últimos años el fármaco ha atraído una enorme atención por su capacidad para ayudar a las personas a perder peso. Para 2021, unos 2 millones de personas Tenía una receta para el medicamento.

Los científicos ahora están aprendiendo más sobre el medicamento y cómo puede influir diabetes y obesidad y otras condiciones de salud crónicas como enfermedad cardiovascularasí como la salud mental.

Un nuevo estudio de la Facultad de Medicina de la Universidad de Pensilvania publicado hoy En el diario Medicina interna de JAMA Se ha descubierto que tomar semaglutida no aumenta el riesgo de síntomas depresivos, pensamientos suicidas o conducta suicida en pacientes sin trastornos mentales graves conocidos. Este hallazgo ayuda a reforzar el perfil de seguridad del fármaco para pacientes sanos en lo que respecta a los efectos sobre la salud psiquiátrica y mental. La empresa farmacéutica Novo Nordisk, fabricante de semaglutida, financió este estudio.

El equipo analizó datos de más de 3.500 participantes en cuatro ensayos clínicos importantes conocidos como Efecto del tratamiento con semaglutida en personas con obesidad (STEP) 1, 2, 3 y 4, que fueron fundamentales para obtener la aprobación de la FDA para la pérdida de peso; Novo Nordisk también patrocinado STEP. El equipo examinó los primeros cuatro ensayos, que duraron 68 semanas entre 2018 y 2020, y STEP 5, que duró 104 semanas entre 2018 y 2021. Durante estos ensayos, los adultos con sobrepeso u obesidad tomaron dosis semanales de 2,4 miligramos de semaglutida o un placebo. A lo largo de los ensayos STEP, los participantes respondieron al Cuestionario de salud del paciente y a la Escala de calificación de gravedad del suicidio de Columbia para medir los síntomas depresivos y la ideación y el comportamiento suicidas, respectivamente.

El equipo de la Universidad de Pensilvania descubrió que no hubo aumentos sustanciales en los síntomas depresivos ni en la ideación y conducta suicidas entre los dos grupos. Fundamentalmente, los participantes no padecían trastornos mentales graves conocidos, por lo que no podemos sacar conclusiones de este estudio sobre cómo afecta la semaglutida a quienes padecen afecciones conocidas.

“Nuestros nuevos análisis brindan garantías de que la medicación, cuando la toman personas que no tienen problemas de salud mental importantes, no aumenta el riesgo de depresión, pensamientos suicidas o comportamiento suicida”, afirmó el autor principal. Thomas Waddenpsicólogo de la Facultad de Medicina Perelman de la Universidad de Pensilvania, en un presione soltar.

El siguiente paso para los investigadores es investigar cómo afecta este medicamento a personas con problemas de salud mental conocidos, como trastorno depresivo mayor y esquizofrenia.

Fuente