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NUEVA YORK — BMW está reduciendo sus objetivos de ventas y ganancias para el año fiscal 2024, en una medida que, según el fabricante de automóviles de lujo alemán, fue provocada en parte por los elevados gastos para abordar un retiro del sistema de frenos que afecta a más de 1,5 millones de vehículos en todo el mundo.
El Grupo BMW, con sede en Múnich, anunció el 10 de septiembre que las medidas relacionadas con la reparación de un sistema de frenos integrado defectuoso, fabricado por un proveedor de la empresa, alcanzarían “una cifra elevada de tres dígitos en millones (de euros)” para el tercer trimestre. También se espera que la suspensión de las entregas de vehículos afectados que aún no están en manos de los clientes afecte negativamente a las ventas.
Un portavoz de BMW Group, que también posee las marcas Rolls-Royce y Mini, confirmó a Associated Press por correo electrónico que la empresa identificó el problema por primera vez durante un control de calidad interno. Eso provocó un retiro por motivos de seguridad en febrero, pero desde entonces se han identificado casos adicionales “más allá del alcance del retiro original”.
Ahora, BMW espera que alrededor de 1,53 millones de vehículos en cinco países se vean afectados, incluidos unos 370.000 en China, 270.000 en Estados Unidos, 150.000 en Alemania, 70.000 en Corea y 60.000 en Francia.
Según BMW, los vehículos afectados se fabricaron entre junio de 2022 y agosto de 2024 y abarcan varios modelos, entre ellos algunos modelos BMW X (excepto X3 y X4), las series 5 y 7, Rolls-Royce Spectre, Mini Cooper y Countryman.
De los 1,53 millones de vehículos afectados, 1,2 millones ya están en manos de clientes, mientras que unos 320.000 siguen en manos de BMW o en stock en los concesionarios. Un tercio de esos vehículos se ven afectados por interrupciones de entregas en mercados individuales, según la empresa.
El portavoz de BMW afirma que la empresa “ha desarrollado un software de diagnóstico para detectar el fallo de los frenos antes de que se produzca”. Si se detecta un posible fallo de los frenos, esto debería alertar al conductor con una advertencia para que acuda a un concesionario lo antes posible para obtener un reemplazo del sistema sin cargo, agregó el portavoz. Si se produce un mal funcionamiento, lo que BMW dice que es “muy improbable”, el sistema también debería volver al “modo seguro”, que garantiza que los frenos funcionen y cumplan con los estándares legales, pero requiere que los conductores apliquen más fuerza al usarlos.
El proveedor alemán de automóviles Continental AG confirmó el 10 de septiembre que fabrica este sistema de frenos integrado para BMW y que el componente defectuoso puede hacer que la caja de cambios dependa de su nivel de respaldo. En un comunicado, Continental también señaló que hay un software de diagnóstico disponible para detectar este problema potencial “mucho antes de que ocurra”.
Continental reiteró que el sistema de frenos puede reemplazarse si se detecta tal daño, pero agregó que espera que “solo una pequeña proporción” de los sistemas de frenos entregados realmente necesiten un reemplazo. La compañía dijo que había acumulado provisiones en un “área de dos dígitos en millones de euros” para cubrir los costos de garantía.
Más allá de los costos asociados a este retiro del sistema de frenos, la actualización de las perspectivas financieras de BMW del 10 de septiembre también señaló una “demanda moderada en curso” específicamente en China, lo que según la compañía está afectando los volúmenes de ventas ya que el sentimiento del consumidor sigue siendo débil, a pesar de las medidas de estímulo del gobierno.
BMW, que cita tanto los costes de los retiros como la caída de la demanda en China, está reduciendo el margen de beneficios antes de intereses e impuestos de su segmento automotor en 2024, una importante métrica de rentabilidad, al 6% o 7%, frente al rango anterior del 8% al 10%. Y la empresa espera ahora que su rentabilidad anual sobre el capital empleado se sitúe entre el 11% y el 13%, frente al 15% al 20%.
BMW también anticipa ahora una ligera disminución en las entregas mundiales para 2024, en comparación con un ligero aumento que se había previsto anteriormente.
